Llegó la primavera y eso sólo puede significar una cosa: béisbol. La temporada 2016 arrancó el pasado domingo teniendo como platillo principal una reedición de la Serie Mundial pasada entre los Mets y los Royals. Como sucedió en octubre pasado, los Royals la ganaron la partida a Matt Harvey y compañía.
Precisamente estos dos equipos parten como unos de los favoritos en sus respectivas ligas, los Royals tienen un grupo ya consolidado de 3 años para acá y quieren ser el primer equipo desde los Yankees a principios de siglo en hacer 3 Series Mundiales de forma consecutiva. Los Mets tienen a la mejor rotación abridora en las mayores y esperan que la ofensiva les responde ahora sí para ganar el campeonato por primera vez desde 1986.
2 de los otros 3 equipos que completan esta lista son un claro ejemplo de que si trabajas bien en tus sistemas de divisiones menores es posible que con paciencia construyas un candidato fuerte al título sin firmar grandes nombres en la agencia libre, esos dos equipos son los Cubs y los Astros. El restante es un viejo lobo de mar que siempre está en la conversación y nunca se le puede subestimar, después de todo han ganado 3 veces la Serie Mundial los últimos 6 años, los siempre complicados San Francisco Giants.