Ya terminó de manera formal la temporada tenística a nivel mundial, al menos en lo que a torneos de altos vuelos se refiere tanto a nivel femenil como varonil. Las grandes historias siempre se comienzan a escribir en enero y es una temporada tan cambiante que como punto más grande inflexión en el año es el proceso de cómo Djokovic fuera del 20 en el primer semestre del año hasta culminar como el mandamás una vez más en el ránking de la ATP.
También se vivieron 3 grandes momentos en el lado femenino con la entrada al grupo de ganadora de Grand Slam a tres tenistas, dos que por muchos años lo buscaron y al fin lo alcanzan, y por otro lado Naomi Osaka consagrándose en Estados Unidos y mostraron gran capacidad como para verla como una de las principales protagonistas en el 2019. Esto y más en el siguiente repaso tenístico del 2018.
Australian Open y la 20ª de Federer.
Roger Federer llegaba a Melbourne Park con 36 años y un título que tenía que defender. Y lo hizo de manera espectacular y probablemente más convincente que en el 2017. Una de las imágenes que quedarán marcadas para la posteridad en la carrera de Roger Federer en verlo llorar tras la premiación en la cancha central de Australia, festejar y emocionarse como un niño cuando ya lo ha ganado todo. Como ya mencionábamos en la introducción, del lado femenino hay mujeres que han luchado durante mucho tiempo por alcanzar esta envergadura de corona, Caroline Wozniacki lo pudo cristalizar en Melbourne un sueño que se le negó en 13 años de carrera profesional.
Acapulco 2018.
Si hay que hablar un poco sobre los torneos en México hay que enfocarse en el más trascendental como lo es Acapulco y un torneo que al fin pudo conquistar Juan Martín del Potro, torneo que fue creciendo en significado para “la torre de Tandil” porque se volvió un local adoptado por la afición mexicana con el paso de las ediciones. Lesla Tsurenko se coronó del lado femenino.
Halep cumple una meta en el “patio” de Nadal.
No es sorpresa que Rafael Nadal ganara su título número 11 en París, pero si fue muy importante ver a la rumana Simona Halep conquistar su primer Grand Slam después de finales perdidas y quedarse a la orilla en anteriores ocasiones. En el proceso para llegar a la arcilla parisina caben destacar los títulos de Montecarlo y Roma, además de Alexander Zverev ganando en Madrid, un primer paso para lo que sería el final del año para el teutón.
La temporada de césped y el renacer serbio.
En la actualidad la temporada de hierba es muy corta y muy selecta, simplemente se trata de los torneos previos a Wimbledon y el propio torneo gourmet del tenis. Angelique Kerber por las mujeres volvió a mostrar una regularidad puntual en un solo torneo y ganó su tercer Grand Slam en tres escenarios distintos, eso nos muestra la categoría de tenista que es y el potencial de la alemana como verla dominar el circuito de la WTA. En tanto, Novak Djokovic lograba coronarse de nueva cuenta en Wimbledon y el circuito volvía a tener el aroma de uno de los países de los Balcanes.
La temporada rumbo al US Open.
El Masters 1000 de Toronto fue para Rafael Nadal y Cincinnati para Djokovic, esto como preámbulo del US Open 2018 donde el serbio alcanzó el Grand Slam número 14, ese que por mucho tiempo se dijo iba a ser una barrera muy complicada de superar por cualquiera cuando Pete Sampras colocó ese trofeo en su vitrina personal. Un dato demoledor, 51 de los últimos 62 Grand Slams disputados los han ganado entre Federer, Nadal y Djokovic. Hubo un intento de robo de protagonismo por parte de Serena Williams en la final femenina, sin embargo, pesó más la voluntad y el gran tenis de la nipona Naomi Osaka para consagrarse apenas a sus 20 años (ahora 21).
WTA Finals en Singapur.
Sloane Stephens llegó para algunos como la favorita al torneo de maestras en Singapur, Angelique Kerber también tenía las credenciales para ganar el título, pero fue Elina Svitolina quien sorprendió a muchos y se convirtió en campeona por primera vez. Esta no sería la última sorpresa del 2018.
Desplazamiento en el trono y sorpresa en Londres.
Rafael Nadal una vez más fue perseguido por las lesiones y terminó por tener como consecuencia su desplazamiento del número uno del mundo a manos de Novak Djokovic quien muchos de esos puntos necesarios los obtuvo en Shanghai ganando el título. Después fue sorprendido en el Masters 1000 de París ante el ruso Karen Khachanov, un torneo que por cierto es bastante apetecible para los no favoritos en competencias de este nivel. Y esto último no fue la única sorpresa para el serbio hacia el final del año, más allá de quedarse con el trono y mirar a todos desde arriba. Y es que Alexander Zverev propinaría tremenda sorpresa en el torneo de maestros en Londres y así lograr su mejor versión y su mejor resultado como profesional que el propio teutón esperará mejore con la obtención de un Grand Slam en el 2019.