La historia contra la nueva sangre. New England Patriots vs L.A Rams son los protagonistas de un Super Bowl LIII que promete ser de antología.
Esta edición del campeonato de la NFL se caracteriza por dos ofensivas de alto octanaje y por lo tanto se pronostica un buen espectáculo, de eso no tenemos duda. Sin embargo, las defensivas, sin ser precisamente las mejores del año, tienen elementos que pueden inclinar la balanza. ¿Podrá salir otro nuevo héroe del anonimato? ¿O acaso la gran jugada llegará vía una superestrella?
Con ello en mente, hablemos de los jugadores claves de este Super Bowl. Aquellos que con una simple jugada o decisión pueden transformar un campeonato. Por qué son esenciales. Vamos.
NEW ENGLAND PATRIOTS.
Tom Brady.
Primero lo primero. Thomas Edward Patrick Brady, Jr. Suficiente debe ser su nombre como para inspirar respeto. Suficiente incluso para ahorrarse las explicaciones. Qué se puede ya agregar sobre Brady a esta altura de su carrera profesional. Es simplemente un fuera de serie y está en el umbral de agrandar su ya histórica figura.
En una temporada en la que a sus 41 años puso números de 4,355 yardas, 19 anotaciones y 11 intercepciones para un rating de 97.7, creo que todos sabemos el porqué de su importancia.
Lo de Brady es ser el mejor traductor de Belichick y la imaginación de Josh McDaniels, pero ante todo, en éste Super Bowl podemos decir que la clave es la ventaja mental que ofrece.
Con 8 apariciones previas en esta instancia, vale decir que sus “nervios” o forma de enfrentar la presión no tendrá comparación en el emparrillado. Claro, el famoso “do your job” es otra clave y por mucho que él esté bien, necesita que el equipo a su alrededor haga su trabajo, pero aun así Brady puede encontrar esa rendija y ver ese duelo que nadie ha notado y explotarlo.
Y también hay que decirlo: es humano. No han sido pocos los juegos (al menos en años recientes) donde le interceptan en el drive definitivo. Vaya, recordemos incluso lo cerca que estuvo del pick en el SB LI y que desembocó en la milagrosa recepción de Edelman, y ni hablar del Super Bowl anterior. Sí, Gurús, por cosas así Brady también es clave y enfrente tendrá un Coordinador Defensivo que lo conoce y sabe cómo presionarle.
¿El padre tiempo hace poco a poco mella? No me atrevería a afirmarlo como Robey-Coleman (CB, Rams) pero para bien y para mal esta es una ventana única para un QB que se sabe cerca del fin. Y eso siempre puede ir para ambos lados.
James White.
Si el juego terrestre es esencial cualquier QB, más todavía para un veterano de 41 años. Belichick encontró en la triada Sony Michel-James White-Rex Burkhead la mejor arma de Brady esta temporada. ¿Recuerdan que les contaba que Patriots ganaría el duelo divisional a Chargers gracias a ese trío? Pues me quedé corto. No solo en el marcador sino en su importancia en ese duelo y en el campeonato AFC. No dudo que vuelvan a ser claves y no olvidemos la figura del fullback James Develin igualmente relevante. Vaya, este trío es clave y punto, pero si hemos de escoger a uno, vamos con James White.
No hay secretos ni elementos por el estilo, a White se le escoge por su experiencia. Y es que es un hecho que Rams, Wade Phillips específicamente, le va a llenar la caja a Brady así como variar formaciones cada cuarto. ¿Qué va a suceder cuando el joven Michel no encuentre los huecos o Brady no descifre los parados? Es decir, cuando se haga sentir la fuerza de Aaron Donald, Suh y compañía. Ahí es donde la ofensiva de Nueva Inglaterra va a requerir no sólo al corredor con más experiencia, sino al que mejor sale y corre las rutas de pase, y ese es James White.
Rob Gronkowski.
¿Gronkowski? ¿El que ya bloquea mucho más de lo que recibe pases? ¿El herido y cada día más lento Rob Gronkowski? Así es, Gurús, Gronko puede ser clave lo que se dice CLAVE.
¿A qué me refiero? Simple: a que puede ser ese receptor del TD ganador o que puede ser quien convierta ese primero y diez que termine el juego en caso de un marcador cerrado.
Claro, Julian Edelman es el arma preferida de Brady y juega un rol situacional. O Chris Hogan bien puede ser el héroe emergente de este Super Bowl, pero eso es algo que se espera. Algo con lo que McVay y Phillips cuentan porque 1) Tendencias y 2) Gronk ya no es lo que era… ¿o sí?
Si revisamos la estadística de la temporada 2018 y sus números en playoffs, es claro que no, pero ojo, súbitamente contra Chiefs volvió a ser ese tipo de jugador que se convierte en el dolor de cabeza de cualquier esquinero. Seis recepciones y 79 yardas puede que no sean apantallantes, pero lo trascendental está en el momento. ¿3ra y 5, 54 segundos, perdiendo por 4 puntos? Lo vaticinó Tony Romo y lo vimos materializarse: Gronkowski para 25 yardas y primera y gol. No me sorprendería ver esta película repetirse.
Mi duda es, ¿está lista la secundaria de Rams en caso de que el ala cerrada de pura “casualidad” salga en un buen día? Y otra, de no ser así, ¿tendrán a ese espía que no lo descuide ni un segundo? Porque ya vimos (y sabemos) que puede aparecer y hacer esa única y relevante recepción en cualquier momento. Y aún sin estar en su mejor nivel, con el ovoide en las manos sigue siendo un tipo casi imparable.
L.A. RAMS.
Todd Gurley.
El juego terrestre es esencial. En un Super Bowl es todavía más importante. Si tu QB es de tercer año (aunque titular completo sean dos) y por primera vez pisa este escenario, pues vale decir que mejor tenga el apoyo necesario de toda la ofensiva y no solo un buen corredor.
Para fortuna de Goff, Todd Gurley es simplemente el mejor RB de toda la liga. Para su infortunio, Gurley atraviesa un mal momento. Vamos por partes.
De una temporada de 1,251 yardas a un cierre gris y después un campeonato NFC donde pasó de noche. Más allá de que resintiera alguna lesión o por el estilo, Gurley se ha visto fuera de sincronía en los últimos juegos.
Dos semanas han sido suficientes para que seguramente reencuentre su momento con el buen consejo de Sean McVay, sin embargo, sí hay ciertas dudas sobre si veremos al Gurley que vimos en Nueva Orleans (es un decir lo de ver) o al que despedazó a Denver en la semana 6.
El flip side: Si es así, no duden que sea el caballo de batalla de la ofensiva y que más temprano que tarde comience a encontrar esas ventajas individuales que hacen estragos en las defensas y ponen la mesa para el show aéreo de Goff.
Por último, un extra: C.J. Anderson. El experimentado RB encontró un hueco de último minuto en el roster de Rams y vaya que ha tenido impacto. ¿Será que Gurley no está fuera de ritmo sino relegado? ¿Es Anderson el as bajo la manga de McVay? Ojo, tal vez aquí está la verdadera clave. Sea como sea ambos pueden hacer más llevadera la presión de Goff.
Aaron Donald.
¿Jugadores clave? En mi opinión Aaron Donald va más allá y es LA clave de Rams. Me parece que la hipotética victoria de Los Angeles pasa por lo que haga o deje de hacer este tremendo tacle.
Lo de siempre: A Patriots se la gana incomodando a Brady y si comete errores, mejor. Chiefs lo intentó pero ni una captura logró. El pass rush de Rams es otra bestia, y ayudado por jugadores como Michael Brockers, Suh y Ebukam, Aaron Donald se vuelve esa pieza disruptiva que apresura al QB, batea pases y también detiene corredores, lo cual en éste caso sea quizás más importante que presionar a Brady.
Y es que como decía en los puntos claves de Patriots, la ofensiva terrestre compuesta por Michel-White-Burkhead ha sido la columna vertebral del ataque de Nueva Inglaterra esta temporada, así que contener ese aspecto suena a media batalla ganada. Claro, muchos podrán decir que poner el juego en el brazo de Brady no es precisamente una ecuación ganadora, y concuerdo, pero si Patriots no establece el juego terrestre, pierde control total del reloj, se vuelve unidimensional y permite que Phillips juegue con las coberturas mostrando de paso algunas formaciones sorpresivas. En todo ello Donald será clave y si tiene éxito, permitirá que los hombres de atrás jueguen más holgados, lo cual nos lleva al siguiente punto.
Aqib Talib.
Clave si juega, clave si no juega. La importancia de Aqib Talib es mayor de la que muchos piensan. Si hay alguien con la veteranía y maña suficiente para hacer frente a la experiencia de Brady, es éste señor. Y qué mejor que estar del lado defensivo y conocer el rival a fondo.
Recordemos que Talib, aparte de ser ex compañero de equipo de Brady, ya lo ha enfrentado en instancias de campeonato, como fue en el AFC Championship 2016. En aquel juego tuvo la misión de contener nada menos que a Gronkowski y lo logró, con algo de polémica, pero hizo su trabajo. Hoy ni Gronk ni Talib son los mismos, pero a este corner aún le queda gas y le sobra experiencia.
Y es que, de nueva cuenta, lo que haga la defensa de Rams me parece más importante que la ofensiva (razón de excluir a Goff). Dudo que puedan contener a Brady y compañía todo el encuentro, pero si cambiarle la jugada, disfrazar las intenciones y no permitir que descubra y ataque las fisuras del perímetro, ahí es donde la experiencia de Talib (incluso fuera del terreno) me parece clave.