Más que duelos clásicos o de pronóstico reservado, lo más atractivo que acompaña la tercera semana de la NFL, son encuentros en los cuales un equipo que nos ha dejado buena impresión, como Vikings o 49ers, se enfrentarán a defensivas que ahora sí los pondrán a prueba.
Igualmente ahí estarán los malaventurados Redskins en un juego de implicaciones vitales para sus aspiraciones. Y una rivalidad que nació la temporada anterior y la cual es, posiblemente, la que levanta las mayores expectativas de la audiencia para este fin de semana. Y no, no son dos equipos. Vean por qué.