La ida de los cuartos de final dejó todo abierto para que Barcelona o PSG se clasifiquen a semifinales. Podría decirse que Barcelona tiene ventaja por haber logrado dos goles como visitante. El planteamiento de Carlo Ancelotti y el constante peligro que significó Zlatan Ibrahimovic, le dejó una lección al conjunto catalán. Les Parisiens tienen argumentos para vencerlos.
Solidez defensiva
Mientras que Gerard Piqué ha mostrado un nivel de juego preocupante, Thiago Silva se ha convertido en el líder de la zaga parisina. Junto con Mamadou Sakho, Maxwell y el veterano francés Christophe Jallet han conformado una defensa casi impenetrable. Quizá su mayor debilidad es por las bandas, pero sus dos centrales son impasables y cuando se agregan al ataque suelen ser peligrosísimos.
Una piedra en el zapato
Zlatan Ibrahimovic es el delantero que ningún defensor desea marcar. Habilidoso con los pies y un peligro constante en el juego aéreo. ‘Ibra' no dejará que los centrales del Barcelona estén cómodos en ningún momento del partido. su capacidad goleadora y labor de sacrificio dejó en claro que el cuadro culé tiene que mejorar muchísimo en defensa, pues los argumentos del sueco podrían hacer pedazos a una línea de emergencia sin Puyol ni Mascherano.
La experiencia de Ancelotti
El estratega italiano es un viejo conocido de la Champions League. Sabe que en el Camp Nou probablemente no tenga muchas opciones de gol, pero que la velocidad de Lavezzi, el desequilibrio de Lucas y el instinto asesino de ‘Ibra' serán fundamentales. En definitiva, Ancelotti no va a regalar nada: seguramente pondrá un mediocampo de mucho rompimiento de juego para buscar frenar a los cerebros del Barcelona, Xavi e Iniesta.