Pretendientes.
Vayamos separando. De acuerdo con el nivel y constancia que han mostrado todos los mencionados, hay equipos que, independientemente de su rival, no tendrían las apuestas a su favor.
En la NFC las víctimas obvias serían las Panteras de Carolina y los Leones de Detroit. Aunque en playoffs TODO puede suceder, ni Carolina ni Detroit se han encontrado con el tipo de rachas que dan confianza y ritmo a un equipo. Las Panteras vaya que han sufrido la agencia libre, particularmente Cam Newton, y no aprovecharon la parte fácil de su calendario. La buena noticia para ellos es que en su división todos andan mal y seguramente les alcance para playoffs, pero para competir con el resto necesitan mejorar, y mucho.
Mismo caso para Leones de Detroit, cuando parece que ya encontraron ritmo, vuelven los fantasmas de siempre: lesiones, indisciplina, etc. A pesar de que hasta el momento tienen la defensa número uno de toda liga, necesitarán del mejor Stafford y Megatron si quieren llegar a la final de la NFC y el camino no es nada fácil.
Del lado de la Conferencia Americana el pronóstico es un poco más reservado, siendo Bengalíes quienes en el papel se ven menos poderosos. Sí, podrán estar en la cima de su división y esperar rival, pero siguen sin convencer. ¿Acaso alguien apostaría por ellos contra Broncos, Patriotas, o hasta los mismos Ravens? Muy pocos.
Y aunque es cierto que en enero nada es imposible, equipos como los mencionados juegan estas instancias a otro nivel mientras que Cincinnati es lo contrario: sólido en la temporada y endeble en playoffs. Así tengan descanso y la ventaja local.
