Solución

DirigentesDentro de toda esta acumulación de situaciones, la solución a estos males de la Copa Oro sería disputar esta competencia cada cuatro años. Los mejores referentes de cada equipo no están en la presente edición y eso hace que se pierda interés. Si se hace está modificación el torneo sería mucho más atractivo, puesto que se jugaría a muerte por el boleto a la Confederaciones e irían con su mejor plantel.
Otra de las cosas que tendrán que adecuarse, son las plazas. Ya es una costumbre, que únicamente Estados Unidos y México sean anfitriones. Es vital que se explore en otras latitudes; Costar Rica, Honduras, Panamá o Canadá podrían ser una opción. Aunque muchos dirán que por su economía no se podría, la Concacaf y la FIFA tendrían la obligación de ayudarlos y respaldarlos para que se lleve a cabo un digno torneo.