El fútbol se extrañaba y vaya que si, la organización de la Copa GNP por México ha sido un buen paso para que los equipos empezarán a regresar a la actividad, tras el parón de casi cuatro meses por el Covid-19 provocando la cancelación del Clausura 2020.
Sabemos que es un minitorneo creado para recaudar fondos para los que más se han visto afectados en este pandemia y la mejor forma de hacerlo sin duda era a través del fútbol ya que es uno de los deportes más apasionantes de nuestro país.
Ahora con las semifinales próximas a disputarse entre Cruz Azul contra Tigres y una edición más del Clásico Nacional entre América y Chivas, las expectativas de ver un espectáculo garantizado desde casa son altas.
Poco a poco se ha visto a cada equipo recuperar su ritmo futbolístico que perdieron, y ya después de la fase de grupos se espera ver algo diferente ya que esta instancia fue de las más flojitas del torneo, aunque se entiende la cuestión.
Y sin duda como dije se espera mucho más ya que los cuatro equipos con tan buenos planteles que tienen los espectadores esperamos ver al propio Gignac o a JJ Macías rompiendo las redes como de costumbre, así como a Guillermo Ochoa y Nahuel Guzmán agigantándose en el arco.
En general, la Copa GNP ha servido más para regresar a los equipos y tomar ritmo para el siguiente torneo más no ha sido realmente para tomarlo con seriedad ya que no es un trofeo avalado por la FIFA pero ha sido una buena propuesta.
