JUEGO TERRESTRE

devonta f
La temporada anterior no sólo fue Ryan quien sufrió por ser apurado y capturado, sino también Steven Jackson, quien corrió para 707 yardas (855 totales) y únicamente 6 anotaciones cuando su papel en los Halcones era ser la segunda mejor arma del equipo tras su llegada de St. Louis.
Independientemente de ello, la verdad es que los mejores años de Jackson ya habían pasado y era hora de que Atlanta le soltara toda la responsabilidad a Devonta Freeman, pero por las dudas que aún había sobre su estado físico, Falcons reclutó en el Draft a Tevine Coleman, para así formar un backfield al menos joven y con opciones.
Para fortuna de todos, ambos lo han hecho muy bien y ello se debe principalmente a tres cosas: gran línea ofensiva, buen plan de juego y por supuesto talento.
Mientras el novato Coleman se destapó con 80 yardas en su debut en el MNF ante Filadelfia y un TD en su siguiente juego contra Giants, Freeman ofreció un desempeño brutal el pasado domingo, al destrozar la frontal de Dallas con 141 yardas (193 totales) y tres TD.
La ofensiva terrestre de Atlanta se ubica en el lugar 14 con un promedio de 106.3 yardas y hasta este momento ha sido clave en el éxito del equipo, algo impensable el año anterior, de seguir así, comenzarán a depender menos de su ataque aéreo y podrán establecer un esquema ofensivo con muchas variantes.