HALCONES DE ATLANTA.
Récord: 5-7.
Si decíamos que Nueva Orleans llegó a Pittsburgh con las apuestas en contra, ni qué decir de Atlanta, que enfrentó al que hasta hace unas semanas era el equipo número uno de la liga, los Arizona Cardinals, en el papel de víctimas. Por eso, su contundente victoria por marcador de 29-18 no sólo fue la gran sorpresa de la semana, sino que los coloca, por el momento, en el liderato de la división.
La importancia de ese lugar es que independientemente de los juegos que les restan, es el duelo del 21 de diciembre ante Santos el que podría afianzarlos en la cima en caso de una victoria.
Tomando en cuenta el buen juego que dieron contra una de las mejores defensivas de la liga, hacer puntos ante Nueva Orleans no debería suponer una misión complicada. Especialmente si Matt Ryan y Julio Jones salen al campo en plan matón. Sí en cambio lo será detener su ataque.
Si hay una defensa peor que la de Santos en puntos aceptados, esa es precisamente Atlanta (403.2 yds). Y ni hablar de su defensa contra el pase (lugar 32 con 284 yds promedio) Es decir, si las cosas no cambian de aquí a la semana 16, este será un juego de muchos puntos donde ganará el que más anote o tenga la última ofensiva. La localía de Santos, parece, ya no es su gran ventaja. Y tomando en cuenta lo bien que se conocen ambos equipos, el duelo promete ser cerrado.
La clave: Que Atlanta, a diferencia de Nueva Orleans, tiene un calendario realmente complicado y necesita ganar al menos uno de los tres juegos restantes. La visita al Superdome parece ser nada ante su siguiente duelo: MNF contra Empacadores en el Lambeau Field. Nada más el mejor equipo en ese congelador que llaman casa. Y recibir a los Acereros al domingo siguiente tampoco será fácil, con todo y que Pittsburgh pueda llegar diezmado. Cerrar en casa contra Carolina podría ser un mero trámite dependiendo de su récord para ese entonces.
Si llegan con dos victorias y una de esas fue contra Santos, el título es suyo. De otra forma, se jugarán todo hasta el último minuto y tendrán que esperar al resto de sus rivales. ¿Despertó Atlanta en el mejor momento? Está por verse.
Probabilidades de título: 50 por ciento. A la inversa de New Orleans, podríamos bajar ese número, pero la mediocridad de sus rivales de división juega a su favor.