Figuras en la cancha y en el banquillo.

imageCristiano Ronaldo es, a día de hoy, el futbolista que mejor está jugando en el planeta. Mejor goleador tanto en Champions (16) como en Liga (31), el portugués es capaz de definir partidos por sí sólo en un abrir y cerrar de ojos. Cristiano está decidido a ser el mejor jugador del mundo, y levantar la Décima con el Real lo elevaría a nivel de leyenda entre los aficionados vikingos. La final se jugará en Lisboa, su cuna futbolística, lo que le dará un incentivo más para hacer el partido de su vida.
Gareth Bale costó mucho dinero al Real Madrid. Es ahora cuando deberá probar que el gasto valió la pena. Su calidad futbolística está fuera de duda y es, junto al mismo Cristiano, uno de los futbolistas más rápidos del mundo. Su cuota goleadora (15 goles en Liga y 5 en Champions) indica que el galés tiene la mira bien calibrada.
El músculo del Madrid lo llevarán Cristiano y Bale. Pero el corazón del equipo bombea con sangre española. Es difícil pensar en dos personas más madridistas que Iker Casillas y Sergio Ramos. Los dos son jugadores determinantes en sus respectivas posiciones y su presencia en el campo le dará al Madrid esa inyección de coraje que todo campeón necesita.
Por último, si el Madrid está bien representado por sus futbolistas en el terreno de juego, en el banquillo no se queda atrás. La dupla técnica conformada por Carlo Ancelotti y Zinedine Zidane derrocha conocimiento del juego y experiencia en este tipo de competencias. Carletto ya sabe lo que es ganar la Champions como entrenador, además de que ambos la ganaron como futbolistas. De esta forma, conocen la presión que los jugadores deben estar sintiendo en este momento y saben lo que sus dirigidos necesitan en su preparación de cara al encuentro.