Andy Murray alzó por segunda vez la corona de Wimbledon después de jugar un torneo que sufrió sorpresa, la más grande ellas, la derrota de Novak Djokovic en tercera ronda. El británico de esta manera consigue su segundo título de Wimbledon a manos de Milos Raonic.
Andy Murray llegó al torneo como segundo clasificado y aprovechó el buen momento de su juego desde su título en Queens previo al 3er Grand Slam del año. El dos del mundo fue avanzando sin muchos problemas, incluso superó a Nick Kyrgios que aparentaba ser un rival de mayor potencia para el británico.
Pero llegó a los Cuartos de final donde se encontró a Jo Wilfred Tsonga, en una instancia donde alguna vez el francés eliminó a Roger Federer. La historia estuvo a punto de repetirse, ya que Murray tuvo que exigirse al máximo para superar a su adversario en 5 sets, situación que consiguió y tras una tachuela más como fue Berdych en semifinales, el campeón de 2013 llegó de nueva cuenta a una final en el “césped sagrado”.