El pasado viernes la Arena México tuvo un combate que enfrentó a Místico, la nueva era, con Carístico, el Místico original.
La contienda se dio en un tradicional relevo australiano, que combinó dos interesantes tercias: por el lado de Místico II, estuvo Volador Jr. y El Terrible; por el lado de Carístico, se unieron Soberano Jr. y Último Guerrero.
Esta interesante combinación de rudos y técnicos marcó la primera ocasión en la que el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) enfrenta formalmente a los dos gladiadores de plata y oro.
Carístico contra Mísitco, ¿viene la buena?
Cabe mencionar que en el terreno independiente ya se han enfrentado, pero es difícil que en esas instancias haya duelos trascendentes que desemboquen en apuesta.
No es común ver a ídolos vigentes en encuentros de máscara contra máscara pues casi no hay promotores que puedan pagarle a un luchador para quitarse la tapa.
Por eso lo que aconteció en el último Súper Viernes de Arena de México es de llamar la atención; no obstante, este primer enfrentamiento no fue el mejor augurio.
¿Por qué no lo fue? Porque la batalla terminó en empate. Si enfrentarlos en relevos australianos ya era tedioso, ahora dejar las cosas inconclusas lo vuelve todavía más suspicaz.
Pero aquí hay que reconocer algo: hicieron que la gente esté pendiente de lo que vaya suceder este viernes que se aproxima, pues quedaron de verse las caras nuevamente.
¿Desde cuándo hay dos Místicos?
Esta rivalidad da para mucho si la saben llevar bien. La historia se remonta a inicios del 2011, cuando El Príncipe de Plata y Oro se fue a WWE con el nombre de Sin Cara.
Mucho le costó al CMLL desprenderse de la estrella más popular que ha tenido en más de una década, por lo que aplicó la ñera: hacer otro Místico.
El elegido fue Dragon Lee, quien recibió la máscara y la bendición (literal) de manos de Fray Tormenta (también mentor de Místico, el original), como un intento de dar legitimidad tanto al gladiador como al nuevo personaje.
Desde entonces se ha tenido que tragar innumerables críticas pese a no ser un mal gladiador; sin embargo, la sombra del original ha sido demasiado como para que el público lo acepte por completo.
¿Aprovechará el CMLL esta rivalidad?
“No es cuestión de los luchadores, es cuestión de la empresa”, dijo a mediados de este año Carístico sobre la posibilidad de enfrentar a Místico II, algo que desgraciadamente es verdad.
¿Tendrá el CMLL la visión y sapiencia para llevar esta rivalidad a los niveles que merece? Soy escéptico sinceramente. Los intereses financieros de la empresa van en contra de tener a uno de los dos luchadores sin máscara.
Por lo pronto, ambos gladiadores se volverán a ver las caras este viernes en la Arena México… pero en relevos australianos, ni siquiera en mano a mano.
Creo que lo interesante no será ver el desarrollo de esta rivalidad, sino cómo la anquilosada creatividad del CMLL arruina este gran enfrentamiento.