Prorroga, Empate y 11 Metros
El partido es muy intenso, pero no parece como se hagan daño ambos, y así es, en este momento el árbitro silba el final del partido y la prorroga espera. Italia ya jugaba con un divino, el divino Baggio ya estaba en el campo, ¡FORZA, FORZA, FORZA! ¡DALE, DALE, DALE¡ Empieza la prórroga, y el partido trabado pero con muy buen ritmo. Todos estamos emocionados, pero me sigue llamando la atención esa bambina, que acaso ¿no le gusta el futbol? Todos estamos al borde del colapso, y ella tranquilamente sigue mirando el partido, — ¿Acaso miras a esa pequeña?, me pregunto un señor que también habla español… —Si, me parece muy peculiar, le respondí, —Ella nunca falta a un partido del Nápoles, es una verdadera fanática, me dijo y rápidamente giramos la cabeza pues argentina llego peligrosamente.
La prórroga seguía, con Goicochea sacando tiros libres, y el 10 tenía las riendas del equipo dirigido por Bilardo. Pero sin duda todos pensamos que este partido tiene un destino diferente, tiene un destino desde los once pasos. El partido esta tan emocionante, que van 23 minutos y el árbitro sigue pitando… Vaya lo termino, jaja que curioso el árbitro perdió la brújula.
El segundo tiempo empieza, todos de pie, y la niña me miro sonriente, le sonreí y sus ojos eran tan lindos que me llenaban de felicidad, ¿Pero…? Porque carajo sonríe. El diez toma el balón, gambetea y Uffffffff! Tiro cerca, el partido es de vértigo, el partido se pinta dramático. Los calambres ya se apoderan de algunos, ¡Ahhhhhhhhhh! Italia cerca! …Argentina llega! Esto es una caldera para todos, menos para ella.
