Bueno, y tenemos la primera mitad de la manzana, se jugaron los primeros cuatro partidos de los octavos de final en Europa, y sólo nos resta esperar a la próxima semana cuando se junten los otros ocho equipos restantes. Por lo pronto, después de muchos goles y emociones, veamos los puntos con los que me quedo tras ver esta semana de Champions.

La Juve no es lo que era

El cuadro italiano siempre tiene esa mística de equipo importante -hasta que llega a las finales- en Europa, que parece ser capaz de todo incluso cuando su plantel no está dominando en la Serie A -lo cual es la primera vez que pasa-, sin embargo, quedó muy claro que esta temporada el equipo tiene todo para decepcionar.
Y es que cuándo habíamos visto que la Juve perdiera una ventaja de dos goles, y peor aún, jugando como local. El manejo de partido lo aprenden los italianos el primer día de primaria, y ahora resulta que estuvieron cerca hasta de que les remontaran.
Aún así, ojo, la Juventus está medio muerta, pero como dije, no deja de ser un viejo lobo que puede aprovechar la «inexperiencia» de los Spurs.

City agarró pichon

Los de Guardiola se ensañaron con los pobres suizos del Basel en St. Jacob Park, y los echaron a pelotazos de la competencia. Claro está que el campeón suizo ya hizo el año con haber entrado a Octavos de Final (2da vez en la historia) y tampoco aspiraban a mucho, pero sí cabe resaltar que de aquel «matagigantes» poco queda.
Esta ronda puede ser muy engañosa, ojalá que el Manchester City no se la crea y entre flojo a los Cuartos de Final, donde realmente comenzará la prueba de fuego para los citizens. Quiero ver que ese equipo nos tape la boca a sus detractores.

La triste realidad de Portugal

El presente del futbol portugués a nivel local es alarmante. La temporada europea ha sido un fracaso tremendo, con las eliminaciones del Sporting y Benfica de manera prematura del certamen, y para acabarla llegó la cereza del pastel con la tremenda vio… goleada que le metió el Liverpool en el Estadio do Dragão. Ese 0-5 es una de las peores derrotas que recuerde del Porto en casa, y pensar que todavía hay que jugar la vuelta…

PSG tropezando con la misma piedra

Para como se había dado el trámite del partido en el Bernabéu, sólo una catástrofe podía provocar que el PSG saliera triste de la ida. Dominaron al Madrid, por ratos le pegaron un BAILE, pero como de costumbre, no concretaron a tiempo y se les vino la casa encima otra vez. Aparte de ello, entró el espectáculo de Emery, con sus movimientos timoratos por mantener el marcador y que demuestran que es un DT de equipo pequeño; ese hombre no aprende.
Por si fuera poco, el hombre más caro de la historia del planeta futbol, Neymar, se la pasó revolucionado todo el partido, con actitudes tóxicas y reteniendo el balón en exceso, es verdad que el gol tuvo su toque, pero llegó ahí para echarse el equipo al hombro y no lo hizo. Así mejor que el Madrid lo fiche de una vez.
Pero bueno, ya todos dan por muerto al equipo parisino, que no se les olvide que el último español que pisó el Parc des Prince se comió 4 pepinos. Los partidos hay que jugarlos dicen por ahí.