Champions

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El sorteo parece haberle sido muy favorable a la Juve, otorgándole al rival que en el papel es el mas débil: el Mónaco. Y es que si recordamos lo cerca que estuvo el Arsenal de remontar la eliminatoria, juntándolo con la solidez defensiva del cuadro italiano y su potencial ofensivo con la dupla Tévez – Morata, hacen ver a la Juve como gran favorito.
La dificultad se presentará en unas eventuales semifinales, donde los partidos ya no mostrarán tanta desigualdad en el papel. Ademas, si recordamos la exhibición que dio el cuadro turinés en Dortmund, podemos ver que esta Juve está a la altura de los partidos grandes, a diferencia de lo que sucedía en temporadas pasadas.
También está, como en la Serie A, la fortaleza como local. Solo 1 derrota en Champions como local en el Juventus Stadium, 0-2 hace un par de años ante el Bayern que a la postre terminaría ganando el triplete con Jupp Heynckes al mando. La espada de dos filos que tiene la Juve en esta competencia es que, al no tener ya casi esforzarse en la liga local, la relajación le puede pasar factura como lo hizo al Bayern el año pasado, por lo que Allegri tiene que trabajar en el tema mental para mantener al equipo a tope, incluso si sus rivales en Serie A no lo exigen.