El logro de una persona

Se puede hablar de todas las estadísticas y récords que sigue rompiendo el suizo como el llegar a extender la marca de más Grand Slam ganados (18) o ser el jugador más longevo en ganar un Major desde Ken Rosewall en 1977 (aquella vez con 37 años). Sus logros van más allá de la cancha de tenis y sus 89 títulos de ATP, cada vez que se expresa fuera de un partido, es un molde ejemplar que todo mundo debería escuchar y aprender de él.

Federer es un ganador por naturaleza, es un tenista con una técnica impecable, un profesional que siempre busca ser mejor cada día y no sólo lo intenta, sino que además lo consigue. Quien lo vio desplazarse en el torneo, parecía un chico de 20 años que apenas inicia una carrera en el tenis, que cada título como el domingo, lo disfruta como si fuera el primero, y que cuando se expresa de sus rivales, lo hace con una categoría asombrosa.

“Si hubiera empate en el tenis, no tendría problema en compartir el título con Rafa”, ese es el tipo de expresiones de un hombre que alguna pisó una cancha de tenis y poco a poco se fue convirtiendo en una leyenda de este deporte, una persona humilde que cuando se retire, dejará un vacío que nadie más podrá volver a llenar.