Por momentos resulta inconcebible el hecho de que el mismo gerente general elija a 2 QB’s dentro del top 10 en años consecutivos. Desvirtúa directamente su credibilidad como evaluador y así mismo afecta la visibilidad que se tiene de la franquicia con respecto a la paciencia y desarrollo que pueden implementar en un jugador.

Steve Keim no titubeó y decidió ceder ante la opción de entregarle la nueva pieza en Kyler Murray que solicitaba su nuevo entrenador en jefe Kliff Kingsbury para los Arizona Cardinals, que a decir verdad, no me parece una decisión equivocada a futuro, simplemente la visión que se tendrá sobre su criterio dejará muchas dudas de aquí en delante.

JOSH ROSEN

En el momento que Roger Goodell anuncio a Murray como la primera selección, Arizona perdió toda ventaja para solicitar un precio alto al canjear a Josh Rosen. Una selección #10 global del año anterior se devalúo en sobremanera a una baja segunda ronda.

Las virtudes de Rosen siguen intactas, el año anterior ingresó a la NFL en un ambiente muy difícil de prosperar. Una de las peores 3 líneas ofensivas de la liga, cambio de coordinador ofensivo en un periodo corto de tiempo y un roster demasiado limitado para establecer con resultados un impacto positivo en la liga.

Rosen sigue siendo un pasador brillante, con un brazo privilegiado y una precisión de primer nivel. A pesar de las dificultades que enfrentó, por momentos dio chispazos de su talento al reconocer y explotar con mucho temple espacios y debilidades en defensivas rivales difíciles de encontrar en la situación que se encontraba.

MIAMI DOLPHINS

El GM Chris Grier movió las piezas de manera brillante a mi entender para hacerse de los servicios de Rosen. Miami necesitaba salir de este Draft con alguna esperanza bajo centro, con Ryan Fitzpatrick está claro que no llegarán a ningún lado y esperar un año completo a seleccionar un QB en el siguiente Draft me resulta una apuesta demasiada riesgosa.

El valor de Rosen, aparte de su edad y su interesante futuro viene al visualizar su tema contractual. De los $17M que firmó en su contrato de novato por 4 años, los Cardinals le pagaron en su primer año $11,358,368, por lo cual, Miami solamente tendrá que pagar alrededor de 6M en 3 años (2M promedio por año). Esa cantidad es difícil encontrarla siquiera en un QB reserva, el precio es excelente para los Dolphins.

FUTURO

Desde el año anterior, considero que Rosen es uno de los mejores prospectos que han salido de la NCAA con miras a la NFL, si bien es cierto que la primer temporada no fue del todo prometedora para la carrera de Rosen el talento no ha ido a ninguna parte. La posición que desempeña requiere en una estabilidad emocional y un amplio conocimiento del juego que irá desenvolviendo poco a poco. Miami debe brindarle la oportunidad desde el día 1 para saber si Rosen será su QB franquicia a futuro. En caso de que esto no suceda y Rosen falle para establecerse como algo sólido para los Dolphins, el precio que habrán pagado será prácticamente nulo y tendrán la oportunidad de redimirse en el próximo Abril. Por lo cual, considero a Miami amplio ganador en este canje por la posibilidad de tener finalmente el salvador de la posición que dejó Dan Marino.