VILLANO: JAIR PEREIRA

En verdad no se puede creer que un jugador pueda tener este tipo de reacciones dentro de la cancha, con todo el dolo de lastimar a un compañero de profesión. Lo que hizo Jair Pererira no fue accidente, no fue por que no vio al jugador, fue una jugada cobarde y con toda la intención de hacer daño. Si la débil Comisión Disciplinaria quiere ganarse respeto, deberá suspender al jugador de las Chivas todo el tiempo que su  Fabbro este en recuperación de su fractura de nariz y unos juegos más, estas actitudes no se pueden dejar pasar y menos cuando se quiere dar una imagen positiva de nuestro futbol en todos los aspectos.

Los saluda su amigo @luisdur23