¿Cómo juzgar al equipo Inglés si el mismo Guardiola esta convencido de priorizar el ganar sobre el jugar bonito? ¿Cómo juzgar a Di Matteo si cualquier otro entrenador en su lugar hubiera hecho lo mismo? ¿Cómo juzgar a la afición inglesa si van a poder disfrutar de ver a su equipo en la final del torneo más prestigioso del mundo?
Creo que es justo para un espectador quejarse de un planteamiento destructivo, ya que no encuentro otro adjetivo, como el que presentó el Chelsea. Pero, ¿existe otra forma de ganarle al Barcelona?
El parado presentado por Di Matteo no fue ninguna sorpresa. Incluso en su campo salieron a especular, que se podía esperar del partido de vuelta. Por el otro lado, el Barcelona salió a jugar como lo tenía que hacer, con todo su arsenal ofensivo dispuesto, y las ganas de revertir la situación.
Alexis Sanchez alargando a los centrales, la entrada de los extremos, el desequilibrio de Messi e Iniesta, y la profundidad y visión de Xavi y Busquets, son sólo algunas de las variantes que presentó el Barca en el primer tiempo, y que por cierto, fueron muy efectivas. Posterior a esto, Barcelona tropieza de nuevo con la misma piedra, ya que tras verse arriba en el marcador, y por la enjundia que imprime la afición, deja espacios enorme en el sector defensivo, y son aprovechados por Ramires, quien nos regala una joya en la definición. A mi entender, en el partido frente al Madrid sucedió lo mismo. Una llegada, un gol. El Barcelona deja expuestas sus limitantes defensivas. Hay que atacar al Barcelona! El problema radica en quitarle la pelota…
La regularidad de un jugador es un paradigma difícil de explicar. Pero, ¿puede hoy la afición catalana juzgar las equivocaciones de Messi?
Creo que una mala noche la tiene cualquiera, y un jugador no se juzga hasta que deja de correr. Messi le ha brindado muchas alegrías a la afición blaugrana, y hoy su juego no presenta una baja, sólo aquella que se llama “una racha goleadora negativa”.
Guardiola pierde lectura del partido por la desesperación de que los dos torneos de prestigio se le iban de las manos. Saca a Fábregas, y mete a Keita, a mi entender, para ganar presencia de área. ¿Porqué pensó en ganar dicha presencia, si el 90% de los jugadores del plantel blaugrana prefieren entrar al área con una pared en vez de tirar un centro? Messi había perdido a su gran aliado, Fábregas, y no encontraba en Keita un socio que le pudiera devolver una pared y generar una llegada de peligro.
En los minutos finales, Di Matteo comete un error garrafal, al sacar a Drogba, quien estaba cumpliendo funciones defensivas, y hace ingresar a Fernando Torres. ¿Porqué metió al niño a desarrollar funciones defensivas? ¿Porque no hizo ingresar a un defensa? No me lo explico, y tampoco se lo explicó Dani Alves, quien aprovechó la desorientación del español para crear una jugada que acabó en gol, mismo que fue anulado.

Fue también Fernando quien por azares del destino quedó solo frente a Valdés, y definió de manera extraordinaria, cortando una mala racha de no convertir goles importantes desde que llegó a Stamford Bridge.
Di Matteo se va contento y preocupado a la vez, pensando en como sustituir las bajas del plantel.
¿El Barcelona pasa por una mala racha, o su nivel esta en declive?
No tengo duda de que el equipo Catalán tiene todavía mucho que enseñar, títulos por ganar, y cantera que explotar.  Mientras siga desplegando ese futbol vistoso y lleno de variantes su límite está por encima de nuestra imaginación.
¿Y esta semana plagada de derrotas? Son sólo cosas del futbol…
 
Fernando Julien