La máxima oportunidad desperdiciada

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La campaña pasada todo indicaba que el Paris había dejado atrás sus complejos, cobrando venganza del Chelsea en Octavos de Final y eliminándolos con autoridad en ambos duelos. Para los Cuartos se enfrentaban a un rival poco acostumbrado a esta instancia como el Manchester Cty, lo cual, se antojaba como un escalón accesible para que, por primera vez, se metieran a la ansiada Semifinal, pero el destino es cruel con ciertos equipos. En algo que se está volviendo costumbre, durante la ida fue mejor el conjunto francés, sin embargo, la fragilidad de su defensiva provocó que no llevara ventaja en su viaje a Manchester, por el contrario, traía desventaja de dos goles de visitante con el 2-2. En el duelo en el Etihad poco y nada que contar del desempeño del PSG, que apenas si incomodó a los dirigidos por Pellegrini, con un futbol temeroso, inoperante y poco propositivo, manteniendo el cero hasta casi el final del juego, cuando Kevin De Bruyne puso los cartones definitivos al marcar el gol que mataba a su rival, dejando nuevamente a Blanc y compañía eliminados prematuramente.