Paciencia e ingenio
La Selección de Klinsmann difícilmente saldrá a competir codo a codo con la Argentina, por mucho que el alemán lo pregone, ya que eso sería un suicidio, por el contrario, los veremos bien parados atrás e intentando contragolpear, por lo mismo, los de Martino se «emborracharán» de balón en la mayor parte del juego y ya hemos visto que cuando los espacios no se dan, muchos de sus jugadores comienzan a frustrarse y a centralizar el juego con pases laterales y ese es justo el estilo de partido que los norteamericanos quieren.
Ante una férrea defensiva, sólo aquel jugador «distinto» es quien puede inclinar la balanza a favor de uno u otro, y la Argentina tiene muchos elementos que pueden desequilibrar y hacer que se abran huecos para sus demás compañeros.