Después del inicio más flojo de un campeón en los últimos cinco años, Chivas logró conseguir su primera victoria en el Torneo Apertura 2017 al vencer a Pachuca con un categórico 3-1.
Esta victoria no sólo le da tres puntos al Rebaño Sagrado sino que también deja ver un buen funcionamiento por parte del cuadro de Matías Almeyda; aprovechó este parón de fecha FIFA.
Ante este panorama surge la pregunta: ¿deben los chivahermanos emocionarse ante lo que parece ser un despertar? Con mugrientos ocho puntos, el campeón está en la posición 14 de la tabla general a tan sólo tres unidades de zona de calificación.
Ya le había hablado de cómo la mediocridad podía salvar a Chivas de un fracaso en el Torneo Apertura 2017 y poco a poco los planetas parecen alinearse en favor de esta posibilidad.
El siguiente partido es contra Pumas, quien no ha podido ganarle a Chivas en calidad de visitante desde hace más de 30 años. Pero esto no debe ser factor; la mayoría daba favorito a Pachuca en esta jornada y la irregularidad del fútbol mexicano prevaleció.
Francisco Palencia nunca fue el problema
El cuadro universitario está peor que Chivas, tiene apenas seis unidades y el cambio de técnico parece que no ha sido el aliciente que necesitaban para encaminarse a la victoria.
La derrota contra Xolos de Tijuana en Ciudad Universitaria dejó en evidencia que el problema no era Francisco Palencia; el problema es una cantera muy débil que no es capaz de defender una playera como la de Pumas.
Este factor no augura una victoria para el Rebaño Sagrado; la tan laureada racha invicta de local de Chivas contra Pumas está plagada de empates, no es descabellado pensar que un 0-0 o que un reparto de unidades por la mínima sea el resultado de la próxima semana.
Lo interesante es que aun en el supuesto de que llegue a nueve puntos, Chivas seguiría aumentando sus posibilidades de meterse a la Liguilla y si mantiene su mejora de juego sería cuestión de que se encontrara con sólo dos victorias en lo que resta del torneo para esperar la carambola que los haga rasguñar el octavo lugar.
Chivas decidiría calificación contra América
Después de Pumas, sigue el clásico contra América. Desde ahorita se percibe una posible victoria rojiblanca, aunque el “Factor Piojo” es el obstáculo más grande para firmar tal profecía. Este duelo decidirá más del 70 por ciento de probabilidades de ver a Chivas en Liguilla.
Una derrota contra Pumas obligaría a Chivas a obtener los tres puntos en el Estadio Azteca si es que aun desea aspirar a Liguilla (confirmando la teoría de la mediocridad); pero una situación así pondría la balanza a favor de América.
Finalmente, vale la pena mencionar que en esta ocasión la posibilidad de ver una victoria de Pumas contra Chivas es más grande que nunca. De momento no se le ve al cuadro universitario los argumentos futbolísticos para vencer a un Chivas que está despertando; en momentos así cuando la irregularidad del fútbol mexicano sale a flote.
El pronóstico a priori es: empata con Pumas y victoria contra América, así que hay un buen margen para ilusionarse.