Parecía que se borrarían del mapa futbolístico, pero no fue así. Los brasileños dieron señales de vida en el mejor momento. La contundente victoria ante el representativo español supone un aliciente para el futbol carioca que en los últimos años venía dando más tumbos que alegrías. La revolución de la Canarinha ocurrió exactamente a un año del magno evento del que será anfitrión, por lo que esta victoria se puede considerar una auténtica resurrección del país sudamericano.
Después de una competencia que aún no alcanza los reflectores deseados, estos son las conclusiones que deja la victoria de los locales: