Inició una nueva edición de la liga MX, y como es costumbre con ella vienen una serie de cambios, fichajes y préstamos que llaman mucho la atención, tal es el caso de jugadores como Ménéz, Pablo Aguilar o Alustiza, no obstante, uno de los más comentados y que a mí me interesa bastante, es el tema de Carlos Gulllit Peña, jugador mexicano proveniente del futbol de Escocia y que pese a tener apenas 27 años, al parecer sus mejores años quedaron atrás.
La llegada de Gullit Peña a Cruz Azul, uno de los equipos más presionados y necesitados de la liga ha dado mucho de qué hablar, y es que este acuerdo ha generado una acalorada discusión entre los que están a favor y en contra de su arribo a La Noria. Creo que de todos los fichajes (préstamo en este caso), este es el que más se presta para la polémica, por lo mediático del equipo al que llega, la popularidad del jugador, su problemática vida privada y su paso por selección Nacional.
Y la discusión que se genera en torno a este tema, va dirigida a un solo punto, si será acierto o error el haber confiado en el Gullit Peña en un equipo con las necesidades de Cruz Azul.
Sí tiene condiciones.
Gullit es un futbolista que explotó al máximo su capacidad futbolística con León, nos expuso un hombre de medio campo con velocidad, con una técnica individual superior a la promedio en México, dinámico, con una conducción larga del balón, y sobre todo que sabía pisar el área rival para colocarse de frente al arco y hacer daño. Simplemente un mediocampista total.
Es verdad que su mejor versión se exhibió hace años, pero si pecamos de optimistas podría embonar en el parado de Caixinha, sobre todo si se para con un 4-5-1, como volante mixto de ida y vuelta. No espero que llegue a retomar el nivel que tuvo en el lejano 2013, no soy tan inocente, pero si alcanzara el 80 por ciento de lo que fue con «los Panzas Verdes» sería maravilloso para Cruz Azul. Sin embargo, la personalidad y carácter que pueda mostrar siguen siendo un enigma para mí.
Otro punto positivo que veo a su llegada, es que propiciará una competencia interna que hace rato no se daba en Cruz Azul, jugadores como Cauteruccio o Rodríguez saben que si en este torneo no pasa nada, se van a ir. Por eso aplaudo la llegada de estos variados y buenos futbolistas para este torneo, ya que por fin (maldita sea, por fin) ser titular implicará el haber peleado por el puesto, y es ahí lo que podría beneficiarle a Peña.
¿Por qué? Porque ante su falta de personalidad, puedo entender que en Chivas no funcionó porque llegaba como figura y solución, mientras que en la Maquina no es así, llega más como complemento que no tiene garantizada la titularidad.
Última oportunidad.
El Gullit ha recibido demasiadas oportunidades, ha mostrado tener muy poco carácter ante situaciones que, por el contrario, él debió usarlas para impulsar su carrera. Dejó ir la oportunidad de ser un jugador titular e importante para la Selección Nacional en la Copa del Mundo; desperdició la oportunidad de Chivas, un equipo grande y mediático que en ese momento estaba necesitado de buenos jugadores e ídolos, pero Peña simplemente decidió ponerse a llorar en una conferencia de prensa.
Puede que esta no sea la última oportunidad para el futbolista en primera división, pero sí será el último equipo importante que se fije en él. Aún está en una buena edad, ya que la mayoría de los futbolistas alcanzan su tope de los 26 a 32 años y Peña tiene 27, sin embargo, otros futbolistas sin llegar a los 30 terminan en el Ascenso MX añorando esos días en los que en la prensa se hablaba de su “gran futuro”.
Conclusión
Si lo queremos medir como un jugador más (que por lo que gana no deberían), podemos decir que posiblemente será útil para el equipo, ya sea viniendo desde la banca o como titular, ya que el técnico lo quiere; el entrenador ya se la jugó para llevarlo a Escocia y ahora se la juega para traerlo de regreso, si alguien está confiando en él, es Pedro Caixinha.
Es difícil decir si la llegada de Carlos Peña es acertada, en este caso en específico creo que depende de la forma en que se mire. Si usted está esperando a un gran refuerzo o que la exigencia hacia el jugador sea proporcional con su millonario salario, me parece que no es acertado su fichaje, Cruz Azul necesita un jugador comprometido, con estabilidad emocional y carácter fuerte, que venga con gran nivel, a tope y que sea solución para los momentos más complejos. Ese jugador, no es el Gullit.
Peña cumplirá con lo mínimo que se espera de él si está mentalmente bien, si se aleja de los problemas extra cancha y si lo colocan en la posición ideal, al lado de dos mediocampistas como en León, y no como nueve y medio. Hagan sus apuestas, con Cruz Azul puede pasar cualquier cosa.