Se llevó a cabo la decimotercera edición de Bound for Glory, el supuesto evento estrella de Impact Wrestling, antes conocido como Global Force Wrestling, antes conocido como Total Nonstop Action Wrerstling (TNA).

A principios de la década pasada, TNA era la alternativa por excelencia ante la peor etapa de WWE, con un John Cena invencible en rivalidades estúpidas con El Gran Khali y Umaga.

Parecía posible que TNA podría desbancar a la gigante del entretenimiento deportivo pero una cadena de malas decisiones los llevó al punto de la banca rota el año pasado.

Hoy en día carecen de estabilidad laboral en todos los sentidos, quedándose sin réferis y viendo partir a más de una treintena de luchadores en menos de un año. Todo eso se reflejó a la perfección en Bound for Glory.

Malas peleas y cambios de cartel

El cartel tuvo que ser cambiado; llamaba la atención el Ultimate X Match, pero fue retirado de último minuto, ¿por qué?, ¿no les alcanzaba el dinero para la infraestructura necesaria?

El encuentro más destacado fue el que dieron Ortiz y Santana contra los campeones de parejas, Dave Crist y Jake Crist. El combate ofreció impactantes momentos llevando al extremo sus humanidades y aprovechando a la perfección las sillas mesas y escaleras.

Llamó la atención el retiro de Gail Kim, pero no por su retiro en sí, sino por la mala calidad de la lucha. Hubo momentos donde esta gladiadora divagó arriba del encordado, sin saber qué hacer o dónde dirigirse.

El encuentro estaba pactado a ser un combate de cuatro esquinas, pero Taryn Terrell prefirió bajarse del barco en medio de la desbandada dejándolo todo en manos de Sienna, Allie y la ya mencionada Gail Kim.

Un público tan malo como el evento

La victoria de ésta última se vio muy descafeinada no sólo por la pobre lucha brindada sino por la gente que se dio cita; se notaba muy aburrida, ni siquiera coreaban los conteos de tres; aquello parecía un simple y llano houseshow (evento no televisado y por lo tanto con mucho menos producción).

La lucha estelar enfrentó a Eli Drake con Johnny Impact, una rivalidad muy laxa que no emocionó a nadie, ni siquiera a ellos mismos.

Eli Drake es un gran rudo, pero parece más concentrado en su matrimonio con Chris Adonis que en la calidad de luchas que brinda.

Johnny Impact es uno de los gladiadores independientes con mejor proyección hoy en día; sólo le falta ser bautizado por el fuego de Japón para poderlo ver con los mismos ojos que hoy vemos a Prince Devitt (Finn Bálor) o AJ Styles.

Dos Caras Jr. no ayudó a la emoción

La intervención de Dos Caras Jr. resultó muy chocante, pues ya se había presentado al inicio del pago por evento, tirando a la basura cualquier gramo de sorpresa.

No conforme con eso, impidió un cambio de manos en el Campeonato Global de Impact, neutralizando el más mínimo ápice de emoción que este pago por evento prometía.

Con Bound for Glory, Impact Wrestling demostró por qué WWE puede darse el lujo de tener uno de sus peores años y aun así estar en la cima del entretenimiento deportivo con historias y luchas basura.

El pago por evento más importante de Impact Wrestling en el año aburrió más que el Veracruz/Toluca que se estaba llevando a cabo en ese momento. Queda claro que hoy en día la lucha libre vive gracias a los independientes.

La nota no la dio Bound for Glory

Tan pobre fue Bound for Glory que hoy en día la noticia no son sus resultados, sino el anuncio que NJPW dio sobre la pelea entre Kenny Omega y Chris Jericho en el Wrestle Kingdom 12.

Esta pelea trasciende por varios factores, entre ellos, la posibilidad de que Vince McMahon esté aprovechando la flexibilidad del contrato de Jericho para llevar al Bullet Club a Wrestlemania.

Además,  va ser la primera vez que Chris Jericho pelea fuera de WWE desde que abandonó WCW en 1999; también marcará su regreso a Japón después de dos décadas, cuando luchó en la extinta Wrestle and Romance (WAR) con el mal recordado Chris Benoit.

La llegada de Dos Caras Jr. a Impact Wrestling no promete arreglar los problemas de la empresa tanto a nivel creativo como a nivel financiero.

Su única esperanza es cristalizar el proyecto que tenían de lanzar una plataforma en línea con toda la videoteca de TNA, así la gente podrá ver los inicios de AJ Styles y al último gran Sting de la historia.