Caray, Gurús… Un 2020 de Juegos Olímpicos y Eurocopa que pintaba de antología se ha convertido, de la noche a la mañana, en el peor año en lo que va de éste joven siglo.
Los estragos que ha causado la epidemia de Covid-19 no tienen fronteras ni distinguen clase, religión, etc. El mundo está detenido, y eso incluye la cultura, el entretenimiento y los deportes.
¿Saldremos adelante? No lo duden. Con más empatía y mejores prácticas en todos los sentidos, yo espero. Mientras tanto, las competiciones locales e internacionales han sido postergadas o de plano canceladas.
La NFL, sin embargo, parece estar en una posición, digamos, ligeramente cómoda. Si bien el Draft ya cambió de fecha y ciertamente lo harán los primeros entrenamientos, el hecho de que la liga sea otoñal/invernal, permite que la agencia libre se desarrolle normalmente con miras a que la situación se restablezca y para septiembre demos inicio a una temporada en tiempo y forma. Crucemos los dedos.
Mientras tanto, el mercado de transferencias ha dado mucho de qué hablar y ciertamente ha resultado único y divertido, vaya, ad hoc a los tiempos.
¿Cuáles han sido los mejores movimientos a la fecha? Aquí cinco de nuestros candidatos. ¡Vamos!

Tom Brady a Tampa Bay Buccaneers.

No podía de ser de otra forma. En un año sui generis la dinastía de Patriotas termina una era diciendo adiós a su jugador insignia: Tom Brady.
Rostro de la organización y líder durante dos décadas, Don Thomas Edward Patrick Brady hizo maletas y hoy es el nuevo mariscal de campo de Tampa Bay Buccaneers.
Este es un gran GRAN movimiento. Olviden los números, los contratos o la calidad del roster; si alguien como Brady llega a tu equipo ya ganaste la mitad de la partida y el siguiente paso es rodearlo de talento y protegerlo. Oigan, y en Tampa vaya que hay material.
Si esa máquina de intercepciones llamada Jameis Winston fue el líder en yardas (5109) de la temporada 2019 y pasó para 33 TD, qué no podrá hacer TB12.
¿Byron Leftwich Coordinador Ofensivo? Por favor, todos sabemos que la mente ofensiva ahí es Bruce Arians, y el señor tiene un esquema que favorece mucho a Brady. Agreguen a ello armas como Mike Evans, O.J Howard más lo que llegue (cof, cof, AB) y ay nanita, tenemos ataque.
Y qué me dicen del lado defensivo con Todd Bowles al mando de una unidad joven con mucho techo.
50 millones por dos años (sin contar clausulas, incentivos) me parece un contrato justo y un gran movimiento.

Calais Campbell a Baltimore Ravens.

Jacksonville Jaguars quemó las naves y el resto de la NFL compró. ¿Quién se llevó la mejor rebanada del pastel? En mi opinión, Ravens.
Sí, tiene 33 años, pero si te ofrecen esa calidad de defensivo a cambio de una quinta ronda, lo tomas. Y si eres un conjunto que aparte necesita reforzar la posición y que vive y muere por su defensiva, pues estamos hablando de una ganga.
Coach Harbaugh ha dado vuelta a la hoja. Sabe que hay puntos clave en la defensiva que necesitaban ser cubiertos. Se extrañó el mando de Terrell Suggs durante la temporada anterior y ahí es dónde Campbell entra a escena. Podrá ser ese jugador disruptivo o quizás tome snaps situacionales, pero es la voz de liderazgo que necesitan. Excelente trade.

Steffon Diggs a Buffalo Bills.

¿Uno de los equipos más sorpresivos del 2019 agregando un receptor elite a su roster? No hay por dónde criticar este movimiento.
Se podrá argumentar que no vale las rondas de Draft que dieron por él (primera, quinta y sexta ronda del 2020 más una cuarta 2021), que costó caro (10 millones anuales subiendo a 11 los últimos tres) o que había otros departamentos más urgentes a reforzar. Sin embargo, Diggs es joven (26 años) y el mejor prospecto de la clase 2020 (CeeDee Lamb, Oklahoma) se va ir en las primeras diez rondas. Me parece que reforzar con una realidad en vez de una promesa a desarrollar, es el movimiento ideal para un conjunto embalado como Bills
Por otro lado, el esquema de Brian Daboll se fue haciendo más agresivo conforme la temporada 2019 iba avanzando. La llegada de Diggs permite usar un personal 11 con 3 receptores básicamente a placer. ¿La verticalidad de Diggs más el brazo y elusividad de Josh Allen en la bolsa? Uff! Suena tremendo.
Como dijo Chris Simms: «Nueva Inglaterra está sangrando, es hora de que Bills ataque a muerte».

DeAndre Hopkins a Arizona Cardinals.

No sé si llamarle un gran movimiento o un horrible trade. Todo depende desde dónde lo veamos; ya sea la perspectiva de la fanaticada de Texans (que están lo que le sigue de enojados) o la de Arizona. Vayámonos con ellos.
Qué llevó a Bill O'Brien a deshacerse de esta bestia ofensiva, es tema de otro post. La cuestión es que Cardinals se puso las pilas y tomó a Hopkins y una cuarta ronda a cambio del corredor David Johnson, su segunda ronda del draft 2020 y una cuarta del 2021. ¡Un robo!
Y mejor aún, Texans absorberá todo el salario de Johnson con lo cual Cardinals ahorra justamente lo que le pagarán a Hopkins. Caray.
Ahora sí Kliff Kingsbury va a poder desplegar todo ese supuesto genio ofensivo y de paso le da a Kyler Murray un arma que lo va a sacar de muchos apuros, pregúntenle si no al pobre DeShaun. Quedará la duda de en qué tanto tiempo (y con que ganas) se adapta Hopkins a un nuevo sistema.

B.J. Finney a Seattle Seahawks.

Un movimiento muy por debajo del radar, sin embargo, a mi me parece una gran firma por parte de Seahawks. Explico.
En la era Carroll, Seattle es un equipo que nunca se ha quedado de brazos cruzados durante la agencia libre. Tarde o temprano firman un pez gordo, pero… son contadas las ocasiones que les funciona.
Más aún, han sido pocas veces las que se han enfocado en reforzar la línea ofensiva, y han sido muchas las que hemos visto cómo sigue siendo un pendiente del equipo. Russell Wilson, de por si un QB con movilidad, ha desarrollado ese instinto a capacidades superlativas porque esa OL no termina de cuajar, independientemente del coacheo.
La llega de B.J. Finney le dará fuerza a la línea pero sobre todo, dinamismo. Finney es un guardia que pasó los últimos cuatro años en Pittsburgh. Se desarrolló bajo las instrucciones del gran gurú Mike Munchak (vaya que Pittsburgh lo extraña) y con ello su rol pasó de ser banca a un next man up que siempre cubrió las tareas asignadas.
¿Pouncey castigado? Finney al quite. ¿Foster lesionado? Finney. ¿DeCastro fuera? Finney es la respuesta. En otras palabras, es un jugador que sabe cubrir bien ambos flancos de la línea y en Steelers ya llevaba un rato pidiendo a gritos la titularidad.
Con Justin Britt saliendo de una lesión y Mike Iupati probando la agencia libre, me parece que Seahawks hizo un gran movimiento en firmar un tipo versátil, bien entrenado y que eventualmente encontrará su posición de titular en una línea parchada.
8 millones por dos años no es mal precio para darle más y mejor protección a la joya de tu corona.