Para una temporada que se caracterizó por sorpresas (sobre todo en playoffs) y no menos decepciones, no podíamos sino pedir una Serie Mundial inédita.

Los Washington Nationals encontraron su mejor baseball en el mejor momento, y con una racha de segunda mitad que ya no dejaron ir, se abrieron paso hasta la Serie Mundial por primera vez en su historia en representación del viejo circuito.

Por parte de la Americana, Houston Astros tuvo una batalla de pesos pesados contra NY Yankees en lo que fue una eliminación de los dos mejores equipos de la liga. Astros venció y ahora está en el umbral de lo que podría ser una dinastía.

¿Quién resultará vencedor? ¿Pesa más el momento, el nombre o la experiencia? La belleza del baseball nos dice que nada está escrito, pero hagamos el consabido ejercicio de predicción. Vamos.

WASHINGTON NATIONALS.

Era finales de mayo cuando, con récord de 19-31, se comenzaba a rumorar la salida de Dave Martínez como piloto de Nationals. Esa sería la última ocasión que Washington se perfilaba, una vez más, al fracaso.

La belleza del baseball y sus diversas ligas es que son benévolas, es decir, hay un gran margen para corregir y Nationals es el mejor ejemplo de ello éste año. A partir de un verano enrachado tuvieron una segunda mitad que los metió a postemporada como el equipo más hot. Y no defraudaron.

La gesta sin duda es haber despachado a Dodgers en eliminación divisional. Después lo de Cardinals se vio como un simple trámite y hoy Washington está en su primera Serie Mundial con un equipo en forma y lleno de confianza.

La Rotación Despertó.

Si bien la espectacularidad está en el gran bateo con que eliminaron a Cards y Dodgers, es la rotación abridora de Nats la gran sorpresa. No porque hombres como Max Scherzer o Stephen Strasburg no sean sinónimo de calidad, sino porque encontraron su fase intratable en el momento oportuno. Simplemente Scherzer tuvo un septiembre horrible donde su efectividad se fue arriba de cinco. ¿Hoy? 1.80.

Colectivamente entraron a playoffs como los treceavos de la liga con una efectividad arriba de 4, hoy… bueno, ya ustedes vieron la historia.

Aníbal Sánchez, Strasburg y Scherzer se combinan para seis victorias y una efectividad colectiva de 1.38. Caso aparte el de Patrick Corbin, cuyos número no reflejan la gran salida que tuvo para barrer a San Luis en el cuarto juego.

Lo mejor es que Scherzer viene muy descansado. Y si no le hacen daño rápido, se va asentar y será un duelo muy duro para Houston.

Cierto que el line up Astro es otro boleto, pero hay material para llevarlos hasta los últimos innings sin producir, y ahí es dónde Washington ha sido letal, pero…

¿Responderá el bullpen?

El relevo de Washington parecía una broma cuando se colaron a postemporada, pero vaya que han salido respondones al son de una carrera permitida en diez entradas.

Aquí la carta de presentación es el cerrador Sean Doolittle, quien ha sido un tipo altamente confiable, pero hay qué ver cómo el volátil Daniel Hudson o Tanner Rainey (nuevo en esta instancia) contienen los bats de Houston y/o aguantan la presión de heredar hombres en circulación. A menos, claro, que lo hagan con ventaja…

El Bateo.

Que si se han despachado con la cuchara grande. Y no por el hecho de las siete carreras que entraron en el primer inning del juego 4 contra San Luis, sino porque las producen en el momento más crítico y así es como se construyen los campeonatos.

La carta de presentación es sin duda Anthony Rendón, quien batea para .375 con siete impulsadas y un homerun. Sin embargo, el que ha demostrado ser un auténtico clutch es Juan Soto. Los nueve hits del joven jardinero son la marca de la casa: llegan en el momento que más le duele al rival.

Pongámoslo así, Soto es el equivalente de LeMahieu en esta Serie, y si Astros lo descuida, van a sufrir.

El resto del line up no desmerece con nombres como Ryan Zimmerman, Adam Eaton, Yan Gomes y por supuesto Howie Kendrick, un bat que ha sido esencial en postemporada y cuya versatilidad ha probado ser una de las herramientas más peligrosas de Martínez.

HOUSTON ASTROS.

Como se esperaba, les costó mucho trabajo vencer a Yankees en un grandiosa ALCS. Jose Altuve salvó la noche y hoy están a cuatro juegos de cumplir su #TakeitBack.

Los Tres Mosqueteros.

Si algo ha quedado claro en esta postemporada de Houston, es que su rotación abridora consta de tres: Gerrit Cole, Justin Verlander y Zack Greinke. O podríamos decir que de Cole y compañía.

No por quitarle mérito a los últimos dos, pero en definitiva Cole está en otro nivel.

De hecho, son ligeramente inquietantes los números de Verlander, quien ha permitido cinco vuela cercas en sus últimas tres salidas; y de Greinke, quien acusó algo de agotamiento en la Serie de Campeonato.

Su experiencia, por otro lado, puede ser esencial para enfrentar a un rival nuevo en esta instancia.

La duda: ¿Quién abre el juego 4? Mucho dependerá del escenario, es decir, de si llegan con ventaja, a punto de barrer, o de plano en las puertas de la eliminación. Ahí la baraja va desde Cole hasta el mexicano José Urquidy o Ryan Pressly.

Un Line up matón.

Si no es Altuve, es Springer. Si no Springer, Bregman. Si Bregman no puede, Brantley o Correa dan la cara…y así nos vamos.

El orden al bat de Houston es uno dónde cualquiera te cambia el juego. Quizás es un poco redundante decirlo cuando Washington también ha tenido sus individualidades, pero hay que destacar que éste equipo vive de ello.

Ahora, vale detenernos un poco en Yordan Alvarez, el casi seguro novato del año en la Americana. Alvarez puso números de 27 homeruns, 78 impulsadas y promedio de .313 para pelear dicho honor. Sin embargo, en postemporada ha acusado inexperiencia y hoy su promedio está en .171 sin vuela cercas aún.

Jugando la carta bateador designado en casa, Astros necesita que despierte YA si quieren aprovechar dicha ventaja. Es hora que el chico haga valer su condición.

LAS CLAVES.

  • Sí, Zack Greinke no ha sido taaan dominante como esperábamos. Pero ojo: 1) Sabe cómo se juega en el viejo circuito 2) Sabe batear, y bien 3) Washington tiene varios ex Diamondbacks y nadie los conoce mejor que él. Aunque ello también juega para el otro lado.
  • ¿Qué Astros tiene ventaja local? Nationals tendrá ya sea a Zimmerman o Kendrick como bateadores designados en suelo de liga Americana. Dos son talismanes puros.
  • ¿Descanso o moméntum? Washington abrirá Serie Mundial con casi una semana de descanso. Astros enrachados aunque con solo tres días y el agotamiento psicológico que implicó la serie contra Yankees. Ninguna de estas cosas ha demostrado ser definitiva para ganar campeonatos, pero sí puede pasar factura en la cantidad de lanzamientos de los abridores de Houston, aunque…
  • De los últimos 8 equipos que han barrido la Serie de Campeonato en la Nacional, sólo uno se ha podido coronar en Serie Mundial.
  • Nationals ha jugado muy bien de visitante en esta postemporada. Astros no puede permitirse ir a Washington con una derrota o esto va a ponerse feo.
  • Más vale que la rotación de Nats haya aprendido a esconder sus lanzamientos, pues, haciendo a un lado falsas polémicas, Astros sabe descifrar bien a los pitchers rivales.
  • Osuna será un gran cerrador en temporada regular, pero me genera muchas dudas su temple en estas instancias. Simplemente no se le ve bien y ojo donde tenga que defender ventajas mínimas.
  • En el duelo de Managers queda claro que la ventaja es de A. J. Hinch. Pero Dave Martinez es alumno de Joe Maddon. No se sorprendan si hace movimientos osados o que desconcierten a Astros.

El MOMENTO CHUSCO.

¿Estamos de acuerdo en que ya todos queremos ver cuando la serie llegue a Washington y sea el turno al bat de Gerardo Parra?

PRONÓSTICO.

Para irnos rápido, Houston será muy favorito, pero si esto llega a un séptimo juego, veo a Washington coronándose… Sin embargo, me parece que la experiencia va a prevalecer. Espero una Serie Mundial reñida donde con un par de destellos defensivos y batazos oportunos de sus estrellas, Astros se corone en seis juegos.