Con la llegada de Alfredo Tena a la dirección técnica del Rebaño y el arribo de Ricardo Peláez como director deportivo, el conjunto tapatío tuvo un repunte sobre el final del torneo, sin embargo no les alcanzó para meterse a la liguilla por lo que Ricardo Peláez no perdió el tiempo y de inmediato comenzó a reestructurar la plantilla de las Chivas.
Dicha reestructuración comenzó con la llegada del seleccionado mexicano Uriel Antuna, quién tuvo una gran temporada y marcó diferencia sobre todo con el combinado azteca.
Competencia para el Cone Brizuela
Uno de los jugadores más regulares y líderes dentro del rebaño es sin duda Brizuela quién, a pesar de no tener competencia interna ha rendido muy bien desde su llegada a Chivas, pero ahora tendrá a Uriel Antuna como su rival por el puesto titular como extremo derecho, a menos de que el Flaco Tena lo habilite como lateral, posición que Brizuela no desconoce.
El primero en llegar
Desde mi punto de vista Ricardo Peláez da un golpe sobre la mesa al presentar a Uriel Antuna como el primer refuerzo de Chivas de cara al siguiente torneo, por lo que la afición rojiblanca espera que los refuerzos que vengan sean -al menos- del mismo nivel que el primero.
Si quiere, puede
A pesar de su corta edad (22 años) Antuna llega con gran experiencia luego de haber iniciado su carrera con Santos Laguna, continuarla en holanda y consolidarse con el Galaxy de Los Ángeles además de que recientemente ha brillado en selección mexicana, por lo que la afición rojiblanca espera que marque diferencia desde sus primeros minutos, sin embargo El Brujo -como lo apodan- ha demostrado tener la capacidad necesaria para marcar diferencia en las Chivas y quizás pueda llegar a convertirse en un emblema de la institución.
Por lo pronto, queda claro que es el fichaje ideal para el rebaño.
