Por fin se termina el experimento kilométrico de la CONMEBOL, la nueva Libertadores, tal cual como deseaban, culmina una semanas antes de que arranque el Mundial de Clubes.
Como bien sabemos, dicho formato hizo que los clubes mexicanos abandonaran la competición y por lo mismo el furor decayó de este lado del cono, aún así, la final de tan prestigiado torneo nos debe llamar la atención, de entrada por el buen nivel de los clubes que están en ella, y segundo, porque de aquí podría salir el hipotético rival del Pachuca dentro de una semanas.
Veamos cómo pinta esta serie entre Lanús y Gremio por la «gloria libertadora».

La necesidad de Gremio

Uno de los equipos brasileiros más criticados vuelve a su cita con la historia. Después de 22 años de no levantar una Copa Libertadores, Gremio tiene una oportunidad inmejorable para hacerse con una Libertadores y agregar su tercer título a las vitrinas.
El camino no fue fácil, si bien no se toparon con rivales de tablas inmensas, Botafogo y Barcelona llegaban como dos de los clubes que mejor desempeño habían tenido en la fase previa, y aún así no supieron descifrar al equipo dirigido por Renato Gaúcho.
Si bien históricamente se les tacha de marrulleros y de no practicar el estilo brasileiro, hoy en día estamos ante uno de los cuadros más espectaculares del fútbol amazónico; un equipo veloz, dinámico y que desequilibra, el verdadero jogo bonito.
El futbolista clave tendrá que ser Luan, quien parece estar viviendo sus últimos momentos en su país, y más si termina por viajar al Mundial de Clubes, donde seguramente aumentará su precio y dará el salto. Así que su cita con la historia tiene fecha.

Lanús sin miedo a nada

El conjunto argentino está a las puertas del partido más importante de su historia. Seguramente, hace seis meses ni siquiera les pasaba por la cabeza estar disputando este encuentro, y hoy lo han logrado, demostrando que no fue casualidad todos los éxitos conseguidos a nivel local.
Y es que Lanús dejó en el camino a escuadras de mayor recorrido y colmillo en este torneo, nada más a dos ex-Campeones como San Lorenzo y River Plate con todo y escándalo de por medio, así que difícilmente les temblarán las piernas al meterse a la Arena do Gremio a intentar pintarle la cara a otro favorito.
En el mando del equipo está un viejo conocido de nuestro fútbol, Jorge Almirón, quien desfiló por media liga y que fue traído por Ricardo La Volpe en aquelos tiempos del Atlas espectacular. De hecho, el propio Almirón se reconoce como «lavolpista» -créalo o no- y con ese mismo estilo de salida con balón controlado y mucho toque está poniendo de cabeza el cono sur.

¿Quién va al Mundialito?

No podría presentarse una final más interesante, dos estilos bien definidos, que tratan bien el balón -ya hacía falta- y que saben que no hay mañana.
En este caso, me gustaría pensar que el fútbol alegre y ofensivo del Gremio hará de las suyas, y terminará de encumbrar al cuadro más espectacular del futbol brasileiro, claro, siempre y cuando no vuelvan a caer en el bache que les hizo perder el Brasileirao.
La ida en Portoalegre será fundamental, si consiguen sacar una ventaja no tan determinante como para confiarse, pero que les dé confianza de viajar a la Argentina, no dudo que le metan el clásico comillo de Gremio para manejar el partido. Y ahora sí, que se agarre el Madrid porque ahí va su «coco brasileiro».
Pronóstico Gurú: Gremio Campeón.