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¿La grandeza nace o se hace? En un fútbol globalizado donde normalmente ganan los de siempre, se podría pensar que la grandeza se forja con muchos años de gloria y esfuerzo, clubes como Real Madrid, Milan, Barcelona o Bayern han sido los habituales dominadores de las competiciones más importantes de Europa y el Mundo, dejando poco espacio para la competencia con otros clubes de menor talla, generando que esto parezca una lucha entre mortales e inmortales.

El mismo fenómeno globalizador ha generado que ciertos personajes se interesen en invertir en este deporte, gente como Abramovich con el Chelsea, Nasser Ghanim Al-Khelaïfi con el Paris Saint-Germain o Al-Fahim en el Manchester City, entre otros, se han cansado de inyectar millones y millones de libras para formar un equipo competitivo que se vuelva exitoso a nivel internacional, haciendo que equipos de media talla en gigantes que acumulan estrellas mundiales.

A pesar de armar equipos a billetazos, son pocos los que han logrado consolidarse, es verdad que Chelsea ya alzó una Champions, además de un sinnúmero de trofeos locales, pero el objetivo final de prolongar sus triunfos aún no se ha logrado, en especial para proyectos como el City o PSG quienes apuntan a lo más alto. ¿Será que ésta es la campaña definitoria para estos jóvenes ricos?